Que no quieras lo mismo que yo, que no sueñes de igual forma, que no des de tu parte ni la mitad de lo que soy capaz (y de lo que me podrías dar), y que sin embargo no te afecte volver sabiendo que me podes lastimar; conociendo mi susceptibilidad a vos y la dificultad para decirte que no, ¿a quién puedo culpar?
Que me mires con los mismos ojos, que me brindes la atención de siempre, que tus manos me causen lo mismo que la primera vez que me tocaste; pero que ésto ya no me baste, que ya no me sacie, que sea menos de lo que hoy en dia quiero para mi.. ¿a quién puedo culpar?
Si ya no soy la misma de hace unos meses, si entre a planificar más. Si a mi vida ya no la pienso solo por hoy y si busco a una persona que ya no sos vos, y sin embargo el sentimiento sigue intacto.. ¿que hacer?
El dilema entre lo que pienso y lo que siento a flor de piel.
El dilema entre lo que pienso y lo que siento a flor de piel.
No quiero más ésto para mi, ésto que tiene nombre y apellido y significa tanto dolor (y tanto amor).
No te quiero en mi vida, nuestro tiempo ya pasó. Fue necesario sufrir y ser feliz, conocerte y que me enseñes a vivir esta experiencia. Ganaste un lugar que nadie te lo va a quitar, crecí y fuiste un maestro para mi. Me diste lecciones que me hacían falta aprender, y fui tomada de tu mano y experimentando algo que no podría haber sido sin vos, por lo menos no igual.. y estoy casi segura, tampoco mejor.
Fue un alto precio el que pagué, es verdad, pero fue necesario.. y hoy no busco volver. Es otra cosa lo que quiero para mi, es otro trato, es otra manera, son nuevas experiencias en las que ya no te incluyo.
Es amor por mi misma alejarme de lo que, extendido en el tiempo, resultaría perjudicial. Cuando insisto en permanecer en algo que terminó, me destruyo. Si me duele es normal, si sufro es mi elección.
Y hoy elijo por mi, alejarme de vos...
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