
En mi sueño el día estaba gris - parecido al de hoy - y yo recorría las calles buscando algo que ahora desconozco. Yo sabía que él no iba a llegar, pero lo seguía esperando, buscaba el lugar indicado. Estaba perdida, no sabía que hacía ahí, si ni siquiera iba a venir. Él era distancia, kilómetros, era derroche de tiempo que transcurría en ese momento. Era la espera sin consuelo, era no darme por vencida a pesar de conocer lo que iba a pasar.
Cuando encontré el lugar para sentarme a pensar, guardando todavía un poco de esperanza para verlo llegar, miré unos metros adelante mío y observé a una pareja que estaba hablando. No se - ni supe - encontrarle el significado a esas dos personas que estaban en la plaza en la que también yo me encontraba, esperando a alguien que no iba a llegar, pensando en cosas que no iban a pasar. Esa pareja era el reflejo de lo desconocido, era lo que no pude descifrar. Eran dudas y a la vez, una serie de comparaciones sin sentido. ¿Por qué ellos podían estar juntos y nosotros no?, ¿por qué ellos estaban unidos, eran acompañados el uno por el otro y yo estaba sola, no tenía con quién compartir mi sentir?, ¿por qué la vida es así?, ¿qué estaba haciendo yo ahí?. Probablemente uno de ellos llegó primero al lugar que JUNTOS acordaron para su encuentro, y ella o él esperó por el otro y así se ENCONTRARON, al rato. Pero yo estaba desorientada, en un lugar que sola decidí que era el indicado para esperarlo, pero él desconocía ese sitio; no sabía ni siquiera que yo estaba ahí para nuestro encuentro. Él estaba lejos y no iba a venir; y así, al fin, me alejé de allí. Baje del pequeño muro de dónde me senté y fui caminando despacio, pasé por al lado de la pareja que se encontraba cerca y ambos me saludaron, sonriéndose. Ellos me conocían, pero yo no los había visto antes.
Cuando encontré el lugar para sentarme a pensar, guardando todavía un poco de esperanza para verlo llegar, miré unos metros adelante mío y observé a una pareja que estaba hablando. No se - ni supe - encontrarle el significado a esas dos personas que estaban en la plaza en la que también yo me encontraba, esperando a alguien que no iba a llegar, pensando en cosas que no iban a pasar. Esa pareja era el reflejo de lo desconocido, era lo que no pude descifrar. Eran dudas y a la vez, una serie de comparaciones sin sentido. ¿Por qué ellos podían estar juntos y nosotros no?, ¿por qué ellos estaban unidos, eran acompañados el uno por el otro y yo estaba sola, no tenía con quién compartir mi sentir?, ¿por qué la vida es así?, ¿qué estaba haciendo yo ahí?. Probablemente uno de ellos llegó primero al lugar que JUNTOS acordaron para su encuentro, y ella o él esperó por el otro y así se ENCONTRARON, al rato. Pero yo estaba desorientada, en un lugar que sola decidí que era el indicado para esperarlo, pero él desconocía ese sitio; no sabía ni siquiera que yo estaba ahí para nuestro encuentro. Él estaba lejos y no iba a venir; y así, al fin, me alejé de allí. Baje del pequeño muro de dónde me senté y fui caminando despacio, pasé por al lado de la pareja que se encontraba cerca y ambos me saludaron, sonriéndose. Ellos me conocían, pero yo no los había visto antes.
1 comentario:
muy bueno lucre.. realmente tenes un don, nunca dejes de escribir ni de darle significado a las cosas q parecen no tenerlo :) (Dani)
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