También fue mío un hallazgo el conocerlo. Encontrarlo e investigarlo en lo más profundo de su ser. Sus gustos, sus preferencias.. y cada manera. Todo sabía, como no cualquiera.
Ahí se desencadenan todos los problemas, cuando dos personas se encuentran. Al conocer el recorrido, de vez en cuando se quiere volver. Y es una puerta que siempre va a estar abierta.
Por desgracia o bendición, se creó el acceso para cuando vuelva la tentación.
De vos y yo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario