Un par de huellas en el cuello y en la vida

Él es increíble.
Consigue de mi cosas que nadie más podría tener.
Se ganó las ganas auténticas de pelear por lo nuestro, contra vientos y mareas.
De hacer hasta el último esfuerzo para no confundirme y confiar en lo que él me dice.
La voluntad de controlar mis celos aunque quiera gritar a los cuatro vientos.
Se ganó mi paciencia, la capacidad de esperarlo la vida entera.
Se llevó mis mejores regalos, todo lo repentino y lo no planeado.
Lo premié de muchas maneras:
voy siguiéndolo en todo lo que me muestra, sin bajar la cabeza.
La entrega nunca es una sola,
se demuestra en facetas.

Quererte me está comenzando a quedar
muy chiquito
:)

1 comentario:

Kristalle dijo...

bonita la entradaaa♥

besitos, espero tu visita