Vivir es lo más peligroso que tiene la vida

Hace un tiempo que vengo pensando que pasaría si la vida fuera eterna, si nunca acabara y si nuestra existencia "para siempre" estara asegurada.
Si fuéramos inmortales podríamos vivir planeando cosas a futuro, ya que sería seguro que algún día haríamos lo propuesto porque tendríamos tiempo de sobra para cumplir con todo ello y podríamos extender nuestros planes a años y años y más años y siempre sería lo mismo mientras nuestra vida fuera eterna. Al saber que viviríamos "para siempre" no nos haríamos problemas por el tiempo y andaríamos despreocupados por hacer las cosas a horarios. Hasta creo (y estoy casi segura) que valoraríamos los momentos mucho menos y perderíamos la esencia de ser. De saber que estamos y es valiosa nuestra existencia, que tenemos que cuidarla y aprovecharla porque todo pasa, nosotros pasamos; hoy estamos y sobre el mañana dudamos.
Me parece que una de las cosas más importantes que deberíamos hacer es tomar conciencia de que somos y estamos formados de tiempo; es la materia más importante, la que nos conforma y nos desintegra a cada uno de diferente manera. Junto a ésto, valorar el hecho de que todo acaba, de que podemos aprovechar cada momento como si fuera el último y gracias a eso, vivir la vida a pleno.
Y vida significa tiempo, no sabemos cuánto ni debería interesarnos eso. Demostrar que en nuestro trayecto podemos dejar lo mejor y vivir con el misterio de ignorar todo lo de más, eso es vivir de verdad.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Il semble que vous soyez un expert dans ce domaine, vos remarques sont tres interessantes, merci.

- Daniel